LA IMPORTANCIA DE LA ALIMENTACIÓN EN LA ETAPA INFANTIL

LA IMPORTANCIA DE LA ALIMENTACIÓN EN LA ETAPA INFANTIL

Todos conocemos la importancia que tiene todo aquello que se refiere a la alimentación y particularmente en el campo de la dietética y nutrición.

Puesto que nuestra labor educativa va dirigida a niñ@s de 0 a 3 años, somos conscientes de la importancia de tratar este tema haciendo partícipes a las familias.

Una adecuada nutrición no solo previene posibles enfermedades sino que nos ayuda a la consecución de un buen estado de salud. En nuestra sociedad muchos de los problemas nutricionales en esta etapa son motivados por excesos.

En el ámbito educativo y más concretamente en la primera etapa infantil, ha de recogerse esta necesidad, integrándola en el quehacer educativo del aula.

Una buena alimentación en esta etapa es importante porque es la época de mayor crecimiento y más acelerado de toda la vida. Además, previene posibles alteraciones en el desarrollo.

El momento de la comida en los/as niñ@s de infantil constituye una rutina cotidiana que favorece el desarrollo de múltiples capacidades, adquisición de contenidos y hábitos de autonomía y seguridad.

Hasta llegar a una alimentación completa se pasa por un proceso evolutivo:

La alimentación del recién nacido es unicamente lácteo, ya sea leche materna o leche maternizada (fórmula). En torno a los cuatro meses se les suele incluir zumos recién hechos que ayudan a la regularización del intestino.

Es en torno a los seis meses cuando comienza verdaderamente la introducción de nuevos alimentos a la dieta del bebé. La leche materna seguirá siendo la principal fuente nutritiva hasta el año de vida pero puede resultar insuficiente, en algunas ocasiones, en cuanto a energía y nutrientes se refiere y es por eso que hay que complementarlo.

Los calendarios de introducción de alimentos son una herramienta orientadora y flexible que se debe adaptar a la realidad del bebé y la familia.

En esta etapa aparecen los primeros purés, primero de verdura y también los de frutas. Poco a poco se irán añadiendo a la dieta alimentos proteicos (carne, pescado, huevo) siempre siguiendo las indicaciones del pediatra y considerando la particularidad del bebé.

La introducción de los alimentos se hace de forma progresiva y gradual, con intervalos de 2 a 5 días entre nuevos alimentos a fin de conseguir que el bebé se acostumbre a los nuevos sabores y a su vez poder detectar posibles intolerancias.

En torno al año de vida, el/la niñ@ debe haber probado prácticamente de todo y se podrá introducir la leche de vaca a partir de esa edad.

¿Cómo cocinar las verduras?.

Las verduras deben cocer con poca agua y mejor en olla exprés, para así aprovechar las vitaminas y minerales que quedan en el caldo. Luego se trituran y se les puede añadir un chorrito de aceite de oliva. Al principio suelen ser purés de patata y zanahoria y poco a poco se irán introduciendo otras  verduras como judía verde, calabacín, calabaza, puerro…

Teniendo en cuenta las recomendaciones de la EFSA (Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición) sobre nitratos en hortalizas, no es recomendable incluir espinacas, acelgas…(hoja ancha) antes del año de vida.

Los purés una vez hechos se conservarán en el frigorífico si se van a consumir el mismo día, sino, congelar. Pero nunca mantener a temperatura ambiente.

Las carnes se cuecen con las verdura. Primero carnes blancas como el pollo o el pavo. Posteriormente las rojas como ternera o cordero. El cerdo más adelante, preferiblemente con poca grasa. Hacia los 9 0 10 meses se empieza a introducir el pescado. Los especialista no suelen introducir este alimento antes de los 9 meses por su peor tolerancia, además, pueden producir reacciones alérgicas y contienen sustancias como mercurio y ácido bórico. Primero pescado blanco que es menos graso, preferiblemente congelado. El pescado azul se introducirá unos meses después. El huevo se introduce cocido, primero la yema, añadiéndolo progresivamente a la verdura, La clara, con más proteínas, un poco más adelante.

En los últimos años está cogiendo fuerza la alimentación autorregulada o alimentación dirigida por el bebe, lo que se conoce comúnmente como babyled weaning. En posteriores artículos intentaremos profundizar más en esta práctica y trateremos de analizar las alternativas y soluciones que plantea.

En cualqier caso, una dieta variada y equilibrada es una de bases de una alimentación sana y saludable.